Seguridad Privada

Cuando hablamos de Seguridad Privada hablamos de un servicio de protección para el hogar, negocio o también seguridad privada personal conocido como guardaespaldas.

Son varios los motivos y circunstancias que te pueden llevar a pensar en contratar un servicio de seguridad más allá de una alarma de hogar. Si te encuentras en alguna de estas circunstancias, te explicaremos lo que necesitas saber al respecto.

Cómo contratar seguridad privada

Antes de empezara a buscar, conviene definir el tipo de seguridad que necesita tu caso concreto, que que el sector de la seguridad privada es muy amplio y quizá necesitamos combinar más de uno de estos servicios:

• vigilantes
• escoltas
• patrullas
• sistemas de alarma
• cámaras de seguridad

La seguridad privada que ofrece mejores resultados y da más seguridad es el vigilante o patrulla de guardas de seguridad.

Elegir una empresa de seguridad

La oferta de vigilantes y guardaespaldas privados es amplia, sin embargo es más recomendable contratar la seguridad a través de una empresa que debe cumplir una serie de requisitos legales. Por otro lado ofrece la garantía de poder reemplazar a un vigilante en caso de que surja algún problema de salud, incompatibilidad de horarios o cualquier otro imprevisto. Una buena empresa de seguridad privada tiene todos los papeles en regla y se encargará de organizar los turnos de sus empleados. Recurrir a un vigilante que trabaja por cuenta propia puede resultar más caro a la larga que pagar la intermediación de la empresa.

Qué debes tener en cuenta antes de elegir la empresa de seguridad:

1. El ámbito de acción puesto que cada comunidad autónoma tiene unos requisitos.
2. Elige una empresa debidamente homologada
3. Asegúrate de que los vigilantes están titulados y no son «matones» aficcionados.
4. Ahora que tenemos la posibilidad de leer las reseñas y opiniones de otros clientes, busca las empresas que tengan más comentarios positivos.

Ley 5/2014, de 4 de abril, de Seguridad Privada (BOE núm. … Real Decreto 2487/1998, de 20 de noviembre, por el que se regula la acreditación de la aptitud psicofísica necesaria para tener y usar armas y para prestar servicios de seguridad privada (BOE núm. 289, de 3 de diciembre).

Todas las empresas de seguridad deben estar habilitadas por las Administraciones públicas como el Ministerio del Interior, la Generalitat de Catalunya o el Gobierno vasco. Existen unas 1340 empresas de seguridad habilitadas en España. No es ,por tanto, un negocio que pueda montar cualquier persona.

Un buen vigilante de seguridad debe tener una serie de cualidades para evitar problemas innecesarios:

• Responsable
• Capacidad de mantenerse siempre alerta
• Habilidad para mantener la calma y la mente fría en situaciones complicadas
• Habilidades para la comunicación en situaciones de tensión y agresión
• Capacidad para trabajar en equipo porque la mayoría de las veces la vigilancia se realiza entre varias personas con diferentes responsabilidades.

La empresa de seguridad es la que se encarga de comprobar que los vigilantes que contrata tengan los conocimientos y la habilitación necesaria (TIP). Un superior les diseñará un plan de actuación para cada tipo de servicio, supervisará el trabajo y se encargará de la inspección formación de sus vigilantes si es necesario.

Funciones del vigilante de seguridad

Entre otras, las principales funciones de un vigilante son las siguientes. por tanto se requiere por su parte una gran profesionalidad.

• Vigilar y proteger bienes muebles e inmuebles. Así como la protección a las personas que puedan los habitan.
• Controlar la identidad en el acceso o en el interior de inmuebles pero sin llegar a retener la documentación personal.
• Evitar infracciones y delitos dentro de su ámbito de actuación.
• Poner a disposición de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad a los delincuentes , los instrumentos, efectos y pruebas de los delitos. El vigilante no puede hacer interrogatorios.
• Custodia del almacenamiento y transporte de dinero y objetos valiosos.
• Atender a la señal de la alarma.

Cómo contratar escoltas privados

Hay personas que en momentos puntuales de su vida necesitan los servicios de un escolta, que pasa a formar parte de su día a día mientras dura la relación. Es importante elegir bien porque tiene que estar constantemente presente y no puede alterar la vida familiar ni la laborar, además de que tiene la vida del cliente en sus manos.

Contratar a un escolta es una tarea más compleja de lo que parece. Lo mejor es buscarlo en una empresa profesional de seguridad privada porque cuando se recurre a un guardaespaldas es porque el nivel de amenaza es importante: viajes a países hostiles, reuniones de trabajo de riesgo, amenaza terrorista, famosos en peligro de sufrir ataques de un fanático,… Las múltiples situaciones que pueden poner en peligro la vida requieren el trabajo de un buen profesional.

¿Hay diferencia entre escolta o guardaespaldas?

El escolta se encarga de la protección cercana, para personas VIP, famosos, políticos, etcétera. Se trata de una protección cercana, discreta, muchas veces invisible.

Las competencias de un escolta son muy flexibles y requiere formación especializada, a veces incluso formación en primeros auxilios, o para tratara correctamente con niños.

Los guardaespaldas no necesitan una formación específica y no portan armas. Pueden repeler el ataque, pero es el escolta el que prioriza la vida de su cliente.

Un escolta ofrece protección en ambientes hostiles, suele ser antiguos militares con competencias específicas, como conducir vehículos en situaciones de riesgo.

Antes de contratar un escolta necesita saber exactamente las necesidades del servicio y las capacidades necesarias del escolta.

Este es un ejemplo de preguntas que debe hacerse antes de contratar una seguridad privada apropiado:

• ¿A quién se dirige la protección cercana?
• ¿Necesita proteger a niños o personas con necesidades especiales?
• ¿Dónde requiere los servicios del escolta?
• ¿Cuál es el nivel de amenaza?
• ¿Se necesita comunicar con la policía?
• ¿Necesita una protección discreta o visible?
• ¿Necesita que la empresa aporte un vehículo y/o un chófer?
• ¿Tiene algún problema de salud?
• ¿Cuáles son los horarios de protección que necesita y por cuánto tiempo?
• ¿El cliente habla el mismo idioma que el escolta?
• ¿Proporciona la comida y el alojamiento?

Antes de contratar un escolta de una empresa de seguridad

Asegúrese de que la empresa es fiable, va a poner la vida en sus manos, así es que fíjese en estos aspectos:

• Desde cuando existe
• Comprobar el estatuto jurídico de la empresa y si está habilitada por el Ministerio del Interior o el gobierno autónomo correspondiente.
• Leer bien el contrato del servicio
• Quizá sea necesario un Contrato de confidencialidad
• Comprobar que los escoltas están cualificados y pedir su CV
• Deben quedar claras las tarifas diarias del servicio
• Pedir referencias y comprobar la experiencia
• Saber qué cubre el seguro de la empresa
• Si el servicio incluye un viaje al extranjero, debe quedar claro cómo se va a proceder
• Se debe asegurar una vía clara y directa de comunicación en todo momento con un responsable de la empresa.